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Zaragoza te habla – El Paseo de Ruiseñores

26 octubre, 2018 - Zaragoza te habla
Zaragoza te habla – El Paseo de Ruiseñores

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En el programa de hoy nos vamos a aproximar someramente a la historia del paseo de Ruiseñores, una de esas antiguas zonas de la ciudad cuyo tránsito por el siglo XX fue toda una experiencia urbanística y arquitectónica de la que hoy apenas si queda la memoria de cómo fue, ni valoración del proceso por el que se ha convertido en lo que hoy es.
Si nos vamos algunos siglos atrás en el tiempo, el actual paseo de Ruiseñores formaba parte de la antigua red de caminos de acceso al sur de Zaragoza y estaba integrado en el camino de Cuarte, ascendente desde los caminos del Sábado y de las Torres, en una zona encajonada entre la acequia de las Adulas fluyendo al aire y los acusados desniveles del monte de Torrero. La llegada de agua a la ciudad mediante la ilustrada obra del Canal Imperial aquí también descompuso la previa red de caminos, que hubo de reordenarse en función de los pocos puentes tendidos sobre el Canal. En este caso, el antiguo camino que nos ocupa quedó dividido en dos ramales, uno paralelo a la acequia de las Adulas y el camino a Cuarte, en dirección al cabezo de Buenavista, y otro corto mucho más secundario que ascendía la acusada pendiente hasta desembocar en el Canal Imperial.
Así fue hasta que a mediados del siglo XIX el aprovechamiento del agua del Canal con fines industriales comenzó a transformas unas propiedades hasta entonces muy periféricas y apenas pobladas por algunas torres de campo. Al principio de la década de los años sesenta de ese siglo el camino aparece ya señalado como “Paseo de los Ruiseñores”, una prolongación del paseo de Cuéllar ascendente hacia el Canal, y con una de las primeras instalaciones industriales harineras de la ciudad: la fábrica de Mendívil, que unas décadas después sería denominada como “La Imperial de Aragón”, y que estuvo en funcionamiento hasta el comienzo de los años ochenta del pasado siglo XX.

A finales del siglo XIX el entonces camino de Ruiseñores fue pensado como una oportunidad de negocio inmobiliario que podría aprovecharse del tirón especulativo asociado al ensanche vertebrado hacia el sur por el paseo de Sagasta, para dar en él cabida a viviendas unifamiliares tanto de primera como de segunda residencia de algunas de las más poderosas familias de la elite económica de la Zaragoza de la época. De esta forma, en 1903 comenzó la parcelación del denominado “barrio de Ruiseñores” con una iniciativa privada impulsada por el emprendedor Santiago Canti Polo, que encargó al ingeniero Manuel Isasi Isasmendi el diseño de seis singulares hotelitos o viviendas unifamiliares construidos en una propiedad suya delimitada entre el paseo de Ruiseñores y los nuevos depósitos de agua diseñados por Ricardo Magdalena. La publicidad de la época utilizaba como reclamo para su venta (por 25000 pesetas), o alquiler (1250 pesetas al mes), la cercanía del tranvía de Torrero, recién electrificado, y la ubicación en una zona “de higiene y salubridad verdaderamente excepcionales”. Resulta interesante que en aquél entonces (albores del siglo XX) la opción del alquiler no significara, como tiempo después, aun hoy, que “alquilar es tirar el dinero”.
En 1904 fue aprobado por el Ayuntamiento el plano de alineación del paseo, y en unos pocos años después el “barrio de Ruiseñores” contaba ya con diecisiete viviendas de la alta burguesía zaragozana, construidas en formas singulares y estilos al gusto de la época: con rasgos de modernismo, eclecticismo, historicismo, regionalismo… Además, y tras la Exposición Hispano-Francesa de 1908, el Jardín Botánico de la ciudad dejó las instalaciones de la antigua Huerta de Santa Engracia y fue ubicado en este paseo, en el punto en que se bifurca con el antiguo camino de Cuarte. Durante la década de los años veinte continuó la construcción de viviendas unifamiliares de próceres y prestigiosos miembros de la elite local, y a este proceso se sumó el de concentración de diversas instalaciones educativas de nueva fábrica, como el Colegio Pompiliano de las Madres Escolapias, y la Residencia de Estudiantes de la Universidad de Zaragoza, inaugurada solemnemente por el rey Alfonso XIII en 1925.
Esta concentración de notables edificios y viviendas unifamiliares continuó creciendo, especialmente en la década de los años treinta, al comienzo de la cual fue construido el referencial “Restaurante de verano de Francisco Gargallo”, o “Restaurant Ruiseñores”, todo en un hito en el gremio de la restauración de la Zaragoza de esos años, pues se convirtió en ineludible punto de reunión de los turistas de entonces que venían a visitar la ciudad por el placer de hacerlo, con muy buenas vistas de la ciudad desde su terraza y salones. Además, fue lugar de moda para comidas, cenas y celebraciones varias, así como espacio de baile.
Muy cerca de este “Restaurant” fue construida la denominada “Casa del Poeta”, una curiosa iniciativa que por suscripción pública levantó en terrenos municipales una residencia para la familia del poeta Alberto Casañal Shakery. No tenía la presencia formal de las otras viviendas de familias bien, pero el hecho de que durante unas décadas Zaragoza contara con una “Casa del Poeta”, es un hecho verdaderamente singular que, por desgracia, ya es solo memoria.
Además, uno de los cercanos hotelitos de principios de siglo diseñados por Manuel Isasi Isasmendi fue habilitado temporalmente como “Casa del Niño”, durante años el único internado para atención y cuidado de la salud de los niños de la ciudad. Y no muy lejos estuvo enclavado el internado del Colegio Academia Estudio, en otra de las singulares construcción de la zona.
Entre las viviendas unifamiliares construidas en esta prodigiosa década de los años treinta hay que reseñar dos de los más importantes ejemplos de la arquitectura racionalista zaragozana, y aun española: la casa de Pedro Hernández Luna, actual Clínica del Pilar, y la casa de Matías Bergua Oliván, hasta finales del año pasado sede del Centro Territorial de Televisión Española en Aragón.
Sin embargo, en las décadas siguientes la imagen descrita del antiguo paseo de Ruiseñores se fue desvaneciendo como si hubiera sido el sueño de una noche de verano. Como dijimos en el anterior programa, sin necesidad de invasión armada extranjera o conflicto bélico interno, casi todos los edificios referidos fueron siendo derribados y sustituidos por nuevas construcciones más modernas y seguramente mejor aprovechadas desde el punto de vista inmobiliario. En los años sesenta, por ejemplo, fue derribado el “viejo” edificio de la antigua Residencia de Estudiantes, en desuso, y fue construido en su lugar del Instituto Femenino Miguel Servet (actual Instituto de Educación Secundaria del mismo nombre). Durante estos años también se construyó algún edificio interesante, por supuesto, como el bloque de viviendas de los números 14-16, representante de la moderna arquitectura del desarrollismo de finales de los años sesenta, cuya altura de diez plantas, comparada con la escala de las viviendas unifamiliares que caracterizaban esta zona, resulta sintomática del radical cambio de paradigma urbanístico producido en este paseo. Los años setenta fueron especialmente inmisericordes con el antiguo paseo de Ruiseñores, cuando varios de los antiguos hotelitos fueron derribados para dar paso a modernas y selectas viviendas seriadas y adosadas, aunque el destrozo continuó después aun en los pocos edificios catalogados y con alguna consideración de interés patrimonial, como sucedió en 1994 con “Villa Alta”.
Finalmente, una consideración: si este paseo de Ruiseñores suele ser considerado como una prolongación del paseo de Sagasta, hay que lamentar que, a diferencia de él, apenas quedan referencias edilicias de lo que fue originalmente, así como tampoco parece haber demasiada atención centrada en el estudio de su pasado, un pasado muy reciente que, sin embargo, pareciera que no hubiera sido, que como reza el clásico soneto, “fuese, y no hubo nada”.

 

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P.º de Ruiseñores 1905

P.º de Ruiseñores 1905 – En 1903 se parceló el “barrio de Ruiseñores” en torno a la calle así denominada, a iniciativa del industrial Santiago Canti Polo, que emprendió la construcción de un grupo de hotelitos o viviendas unifamiliares en un terreno de su propiedad, siendo todas ellas proyectadas por el ingeniero Manuel Isasi Isasmendi. Estas viviendas eran consideradas “de recreo” por la burguesía local, con la ventaja de que se hallaban “en las inmediaciones de Zaragoza”. En la imagen promocional, los seis hotelitos referidos: por ejemplo, en la parte inferior, a la derecha, el denominado “Villa alta”, que fue derribada en 1994. A su izquierda, el denominado “Villa Rosita”, adquirido por Raimundo Balet y luego objeto de varias reformas, como la de 1919 con proyecto de Miguel Ángel Navarro Pérez. Fuente visual: Mª Pilar Biel Ibáñez, Zaragoza y la industrialización: la arquitectura industrial 1875-1926, IFC, 2004. Proyecto GAZA (“Gran Archivo Zaragoza Antigua”) es un compendio de imágenes de la antigua Zaragoza (España), acompañadas de textos creados por José María Ballestín Miguel y la colaboración de Antonio Tausiet.

 

P.º de Ruiseñores 1922

P.º de Ruiseñores 1922 – El efecto dominó de la instalación de los Depósitos de Agua en la parte alta del Paseo de Cuéllar, con la reparcelación de la zona, permitió la creación, en 1903, del proyecto de “barrio de Ruiseñores”, junto al paseo de ese nombre, en una zona deshabitada de humanos. La nueva planta, planificada sobre terrenos como los de la antigua Torre de Marraco, estaba pensada como una extensión del cercano Paseo de Sagasta, con viviendas unifamiliares y estilosas para la alta burguesía local, en una zona donde (tras eliminar una lechería y grandes establos) el aire era más puro que abajo, en la lejana ciudad. Seis construcciones-piloto (Lucas Abós, Viuda de Collado, Emilio Ostalé, Ángel Abós, Raimundo Balet, y Sebastián Rodríguez), inauguraron esta exclusiva zona en 1905, y señalaron un camino pronto seguido por notable y selecta parroquia. En la imagen, el paseo de Ruiseñores. A la derecha, aspecto de los originales primeros “hotelitos” de la zona, localizados junto a la parte oeste de los Depósitos, con visual insólita del de Sebastián Rodríguez, y su llamativa torrecilla apuntada. A la izquierda, andamios de construcción del Colegio Pompiliano de las Escolapias, recién llegadas al barrio. Como en la mayor parte de las construcciones de la zona, lo que hoy hay, poco más de nueve décadas después, poco ha de ver con lo que hubiera, o hubiese. Fuente visual: AHPZ, Archivo Gabriel Faci. Proyecto GAZA (“Gran Archivo Zaragoza Antigua”), es un compendio de imágenes de la antigua Zaragoza (España), acompañadas de textos creados por José María Ballestín Miguel y la colaboración de Antonio Tausiet.

 

P.º de Ruiseñores 1930

P.º de Ruiseñores 1930 – “Vista de la subida de coches y estancia” del “Restaurant Ruiseñores” de Zaragoza, tarjeta postal editada por “Huecograbado Mumbrú S.C. Barcelona”. En 1930, el arquitecto Marcelino Securun Orga diseñó el “Restaurante de verano de Francisco Gargallo”, localizado al principio del paseo de Ruiseñores. En la imagen, empinado acceso rodado desde el paseo, que queda a la izquierda, donde se encontraba la entrada principal. Este lugar, al principio de los años 30 del pasado siglo, quedaba bastante lejos de lo que entonces se consideraba ciudad. A la derecha, muros perimetrales de los extensos depósitos de agua lindantes con la avenida de Wilson y los jardines de Pignatelli, el destino final del monumento al ilustrado prócer tras su destierro de la plaza de Aragón. A la izquierda, fuera de plano, aunque inmediata, la galería y traseras de la “casa del Poeta”, sufragada por la ciudad para el renombrado bardo Alberto Casañal Shakery, entonces en construcción. Este “restaurant”, que incluía una concurrida pista de baile, y que era lugar de moda para comidas y cenas de posibles, a los pocos años fue clausurado, y las construcciones de la imagen quedaron abandonadas y en ruinas, hasta que al comienzo de los años 50 este entorno fue nuevamente edificado, ahora con viviendas. La dura cuesta de acceso ha sido cerrada con verja, pues forma parte del privado espacio edilicio al que se accede desde la actual calle de Santiago Guallar. Fuente visual: www.todocoleccion.net/ Proyecto GAZA (“Gran Archivo Zaragoza Antigua”) es un compendio de imágenes de la antigua Zaragoza (España), acompañadas de textos creados por José María Ballestín Miguel y la colaboración de Antonio Tausiet.

 

P.º de Ruiseñores 1950

P.º de Ruiseñores c.1950 – Imagen de la que fuera originalmente denominada “Villa Rosita”, o vivienda unifamiliar de Raimundo Balet proyectada por Manuel Isasi Isasmendi en 1903 y sita en el “barrio de Ruiseñores”, ya notablemente reformada por intervenciones como la de 1919 con diseño de Miguel Ángel Navarro Pérez, y alguna otra posterior que le añadió su elemento arquitectónico más reconocible: el modernista y esquinero torreoncillo a la izquierda de la imagen. Cuando era propiedad de Ramón de Pedro, esta fotografía fue realizada para publicitar el edificio como colegio de bachillerato “Los Ángeles” en el paseo de Ruiseñores nº 39. Tras unos años en desuso, a finales de la década de los años cincuenta el edificio cambió de propietarios y fue convertido en el nuevo colegio Santo Tomás de Aquino de bachillerato masculino, lo que conllevó una ampliación edilicia en las ajardinadas traseras, y una reforma interna y de la fachada. Así continuó hasta su clausura en 1986. Fuente visual: “Zaragoza. Arquitectura. Siglo XX”, Jesús Martínez Verón. Proyecto GAZA (“Gran Archivo Zaragoza Antigua”), es un compendio de imágenes de la antigua Zaragoza (España), acompañadas de textos creados por José María Ballestín Miguel y la colaboración de Antonio Tausiet.

 

P.º de Ruiseñores 1968

P.º de Ruiseñores 1968 – Interesante visual aérea centrada en el novísimo Edificio Ruiseñores levantado en los números 14-16 del paseo de Ruiseñores, con diseño del arquitecto Enrique Delso Calavia en una escala que destaca de forma radical de su tradicional entorno edilicio. Su construcción se realizó sobre el terreno donde estuvo ubicada la antigua casa del arquitecto Miguel Ángel Navarro, de tres alturas, que además contaba con estanque, plazuela, jardines, andadores, algunos edificios auxiliares, y escaleras en descenso desde el paseo hasta el cauce al aire de la acequia de San José. Al fondo, solares entre el cauce del río Huerva, la calle del Arzobispo Doménech y el Grupo Salduba donde pocos años después serían iniciados los grandes bloques de la Urbanización MARVEL. Fuente visual: “Zaragoza. Arquitectura. Siglo XX”, Jesús Martínez Verón. Proyecto GAZA (“Gran Archivo Zaragoza Antigua”), es un compendio de imágenes de la antigua Zaragoza (España), acompañadas de textos creados por José María Ballestín Miguel y la colaboración de Antonio Tausiet.

 

P.º de Ruiseñores 1969

P.º de Ruiseñores 1969 – Imagen del paseo de Ruiseñores en la acera de los pares, en el tramo en torno a la calle Fernando de Antequera. A la derecha, entre neblinas, emerge la alabeada fachada del representativo bloque de los números 14-16 (“La Casa de los peces”), novísima muestra de la arquitectura de finales de los 60; el nº 20, del que apenas se ven unas ventanas entre las ramas, que fue la antigua casa de Pedro Hernández Luna (diseño racionalista de los Borobio), reconvertida y transformada en los años 40-50 en la Clínica del Pilar; y esquina del nº 22, la casa de Manuel Hernández, de Regino Borobio, destacada muestra de aires modernistas y art déco, en pie hasta que llegue la movida década de los ochenta… Es hora de escuela, y eso en esta calle se nota mucho. Fuente: “Zaragoza viva” (1969) Proyecto GAZA (“Gran Archivo Zaragoza Antigua”), es un compendio de imágenes de la antigua Zaragoza (España), acompañadas de textos creados por José María Ballestín Miguel y la colaboración de Antonio Tausiet.

 

P.º de Ruiseñores 1974

P.º de Ruiseñores 1974 – Luminoso paseo de los Ruiseñores con visual, a la izquierda, de los pares, en el tramo en torno a la calle Fernando de Antequera y Santiago Guallar, con aspecto del bloque de los números 14-16, proyectado por Enrique Delso Calavia, cuando aún tenía peces en su particular estanque; del nº 18, superviviente en precario desde mediados del siglo pasado, aunque abandonado y pendiente de piqueta; y el nº 20, la antigua casa de Pedro Hernández Luna, transformada en los años 40-50 en la actual Clínica del Pilar. En la acera de los impares, a la derecha, una despejada e irrepetible vista de la antigua “Casa del Poeta” Alberto Casañal Shackery, construida en 1930 por suscripción popular, y que será piqueteada por sus herederos en 2004 para mejor aprovechar el espacio. Un poco antes, aspecto de los antiguos muros perimetrales del nº 31-33, antes de no poder resistir el empuje de una otra piqueta. Proyecto GAZA (“Gran Archivo Zaragoza Antigua”), es un compendio de imágenes de la antigua Zaragoza (España), acompañadas de textos creados por José María Ballestín Miguel y la colaboración de Antonio Tausiet.

 

P.º de Ruiseñores 1980

P.º Ruiseñores 1980 – Imagen capturada en el paseo de Ruiseñores y centrada en la reja perimetral de la que fuera “Villa Casilda”, entre la Casa de Bergua recién reconvertida como Centro Regional de Televisión Española en Aragón (derecha), y el Instituto femenino de bachillerato “Miguel Servet” (a la izquierda, fuera de plano, donde estuviera el jardín botánico de la ciudad). Como en no pocos casos radicados en este paseo, la villa fue derribada y sobre el amplio espacio del hotelito, jardines y huertos traseros se construyeron varias decenas de exclusivos chalets adosados. Los vehículos aparcados fuera de la calzada, una marca distintiva de las fotografías de la época. Fuente visual: AMZ. Proyecto GAZA (“Gran Archivo Zaragoza Antigua”), es un compendio de imágenes de la antigua Zaragoza (España), acompañadas de textos creados por José María Ballestín Miguel y la colaboración de Antonio Tausiet.

 

 

 

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