Aunque todos los grupos venían de cobijarse debajo de las más diversas etiquetas, quien quería significarse debía aparecer como singular, o sea, sin etiquetas. Y, bueno, hubo algunos que lo consiguieron.
Un claro ejemplo lo tenemos en Pretenders, con Chrissie Hynde como cantante y guitarra. Ella era periodista del New Musical Express, muy unida al movimiento Punk (aquí está su anterior etiqueta) antes de probar suerte con el nuevo grupo. Uno de sus éxitos: I’m not in love.
Pretenders inició su andadura en 1978. Venía huyendo del Punk para echarse a los brazos de la new wave. La banda se componía originalmente de su fundadora, compositora, guitarrista y vocalista Chrissie Hynde, el guitarrista James Honeyman-Scott, el bajista Pete Farndon y el batería Martin Chambers. Las muertes de Honeyman-Scott y Farndon por consumo de drogas malograron la formación, y los múltiples cambios de músicos en los años posteriores han dejado a Chrissie Hynde como único miembro permanente y referente absoluto del grupo. Además, su actividad en diversos frentes a favor de causas humanitarias la mantiene en el candelero permanentemente.
Su primer gran éxito: Don’t get me wrong.
A finales de 1981, cuando el grupo triunfaba musicalmente, comenzaron los problemas personales. Las relaciones de Pete Farndon con el resto de sus compañeros se fueron deteriorando durante la gira mundial que siguió a Pretenders II, a causa de la adicción del bajista a la heroína. Cuando terminó la gira, decidieron despedir a Farndon, que se había vuelto intratable. Chrissie Hynde, que esperaba ya un hijo de Ray Davies, comunicó a su ex novio Pete la decisión de expulsarle del grupo.
Sin embargo, fue Honeyman-Scott, también enganchado a todo tipo de sustancias, el que repentinamente murió el 16 de junio de 1982, tan sólo dos días después de la expulsión de Farndon. El guitarrista fue hallado muerto por paro cardíaco en casa de un amigo, a causa de una sobredosis de cocaína. Meses más tarde, y en pleno proceso de recomposición de la banda, recibirían la noticia del fallecimiento de Pete Farndon. El bajista se ahogó en la bañera tras inyectarse heroína y perder el conocimiento el 14 de abril de 1983.
Con el tiempo, la crítica ha reconocido de forma unánime la importancia de ambos músicos en el sonido de la banda y su influencia en el rock. Amen.
I’ll stand by you, una bonita canción de amor, “Estaré a tu lado”… y otro gran éxito del grupo.
Al éxito del grupo contribuyó, sin duda, el hecho de que la banda estuviera liderada por una mujer de apariencia dura y «cuya sexualidad está totalmente en sintonía con una magnífica sensibilidad rockera». Con su característico flequillo, sombra de ojos y vaqueros oscuros y ajustados, lo cierto es que resulta atractiva a ambos sexos al tiempo que ha sido capaz de zafarse de muchos de los clichés asociados a las mujeres en la música pop. A diferencia de otras cantantes solistas, Chrissie adapta a su propia personalidad algunos de los roles tradicionalmente masculinos del rock en su papel de líder del grupo.
Los dejamos con otro de sus grandes éxitos: Brass In Pocket.
Otra inclasificable que mencionar es Kate Bush.Tenía una voz única y, a todas luces, ajena al mundo del rock, pero los designios del Señor son inescrutables.Descubierta en 1978 gracias al respaldo de David Gilmour, de Pink Floyd, llegó a lo más alto con esta canción: Wuthering heights.
El video empezaba a adueñarse de la escena musical. Una canción que tuvo un gran éxito y que pretendía ser premonitoria fue “Video killed the radio star” (El video mató a la estrella de la radio). Evidentemente su profecía quedó en nada, pero la canción estaba bien. Los culpables del bombazo fueron los Buggles, un dúo formado por Trevor Horn y Georr Downes, aunque su carrera no dio para más,
“Video killed the radio star”
Sin embargo, Trevor Horn, cuando el dúo dejó de funcionar, creó un nuevo sello con el que lanzó al estrellato a Frankie Goes to Hollywood y su famoso “Relax”.
Seguramente el artista más inclasificable y personal fue Ian Dury. Nació en 1942. Después de terminar el instituto, estudió arte y mientras daba clases de pintura decidió que dejaba el pincel, por lo menos profesionalmente, para intentar buscarse un hueco en el mundo de la música. Y lo hizo.Tetrapléjico desde los siete años, el hombre actuaba con muletas, aunque esta circunstancia nunca le supuso ningún problema. A él se debe el famoso eslogan “Sexo, drogas y rock and roll”. Y esta es la canción.
En los EEUU varios músicos de estudio, cansados de grabar para los demás, se unieron para formar Toto. En mi opinión son buenos, muy buenos, un poco tiernos quizá, pero como músicos no tienen precio. Esta opinión está enfrentada a la de grandes especialistas del género, pero… allá cada uno con sus opiniones. Este es su super éxito África.
Los integrantes de TOTO, en su calidad de músicos de estudios, han tocado en miles de discos, Jeff Porcaro (baterista) registra más de 1050 álbumes (pese a su prematura muerte); Steve Lukather (guitarrista) más de 1530; David Paich (tecladista) más de 1720, y así.
Frente a esto no es exagerado decir que gran parte del sonido pop/rock de la década de los ochenta fue generado por los músicos de la banda. Sin embargo, pese al éxito mundial y a la notable contribución de la agrupación a la industria musical, el grupo se considera,así mismo, como la “banda la más incomprendida del mundo” debido a las críticas negativas que ha tenido en el transcurso de los años en los medios estadounidenses e ingleses.
El rechazo que ha generado la banda en estos medios, especialmente en la prestigiosa Rolling Stone, está basado en la falta, según su criterio, de una propuesta estética y porque sus especialistas jamás han concebido ni han aprobado que una agrupación mezcle tantos estilos musicales como lo hace Toto. Cosa que, a mí, me parece genial.
Pero no todo son críticas: el extraordinario guitarrista Steve Vai dijo una vez que fue a verlos a Milán: “Esta banda creó un sonido propio y único. Es la perfecta mezcla de rock, pop, fusión y un poco de jazz, todo en un paquete totalmente armonizado”, o Eddie Van Halen, que se refirió a la agrupación como “colectivamente, compuesta por los mejores músicos del planeta”. Pues eso.
No faltaron en la época los grupos de un solo éxito, como los Knack y su eficaz “My Sharona”.
Al parecer, Doug Fieger, guitarrista de Knack, se enamoró como un loco de una dependienta de una tienda de ropa llamada Sharona y se puso a escribir frenéticamente canciones dedicadas a tan bella señorita. No sé como acabó el asunto, pero la canción no está mal.
Tom Waits, el músico y actor californiano, tiene predilección por las canciones de tono áspero, generalmente inspiradas en escritores como Charles Bukowski y algunos de la generación beat, en especial Jack Kerouac.
Waits tiene una voz distintiva, bueno ya lo veréis, tanto que se ha escrito de él que “su voz suena como si el tipo hubiese sido sumergido en un depósito de bourbon, ahumado durante unos meses, y luego llevado afuera y aplastado por un coche». En fin, algo de razón llevan.
Su música, basada en el blues, el jazz y el vodevil, ha conseguido construir un personaje musical singular y sus canciones de representan complejos retratos de lugares y personajes muy variados y nada convencionales. Dada su poca repercusión mediática en televisión y radio, algunas de sus canciones son más conocidas a través de versiones hechas por otros artistas: tal es el caso de «Jersey Girl», interpretada por Bruce Springsteen.
Pues muy bien, ya hemos terminado por hoy. Estoy seguro que la selección ha sido de vuestro agrado. En cualquier caso, nos ha servido para constatar que “la estrella de la radio” no ha sido asesinada por nadie, que sigue viva y que lo seguirá estando mientras vosotros… estéis ahí. Así que, gracias por seguirnos.
Viva la radio y viva el rock and roll.
Amigos, amigas, hasta la semana que viene y mientras tanto…
¡¡¡BUENAS VIBRACIONES!!!