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Elvis Costello, nuestro invitado de hoy, ha levantado su carrera sobre dos pilares importantes que, al principio, solo podías intuir: una forma de cantar única, muy reconocible, y una gran versatilidad musical. Como se suele decir, es uno de esos artistas que “ha sabido reinventarse”, y además lo ha hecho varias veces.
Esto era Alison, primer sencillo de Elvis Costello. Pero vayamos por partes.
El músico nació en Londres el 5 de agosto de 1954. Hasta el año 1975 Costello llevaba una vida un tanto anodina, casado con un hijo y saltando de trabajo en trabajo. No obstante, ya empezaba a componer sus propias canciones y a grabar rudimentarias maquetas que repartía por pubs y emisoras locales. Y en esto estaba cuando Jack Riviera, director del sello independiente Stiff Records, reparó en él y le ofreció un contrato.
Lo primero que hizo Riviera fue cambiarle el nombre. Nuestro amigo se llama, realmente, Declan Patrick MacManus, y a su promotor parece que no le cuadraba mucho y decidieron cambiarlo por el más comercial Elvis Costello, Elvis por Presley y Costello por el segundo apellido de su madre. La suerte estaba echada, Elvis Costello directo al estrellano.
El año 1977 fue un punto de inflexión para la carrera de Costello. Este mismo año lanzó dos sencillos, uno de ellos “Alison” que ya hemos escuchado y también su primer LP. Este trabajo tuvo una buena acogida ade la crítica pero escaso éxito comercial.
El problema radicaba en que sus discos solo se distribuyeronen el Reino Unido lo que suponía que en EEUU solo podía importarlos. No contento con esto, no se le ocurrió otra cosa que ir a las puertas de una convención de la CBS Records en Londres y ponerse a cantar sus canciones como protesta porque ninguna compañía estadounidense había consideraro oportuno publicar sus discos en los EEUU. Costello fue detenido por la policia pero a los dos meses firmó con la CBS.
Para su primer álbum Costello contó con la colaboración de Clover, una banda de country de la costa oeste y con ellos grabó su primer éxito de ventas: “Watching the detetives”. La canción contiene párrafos mordaces sobre la violencia en la televisión a ritmo de reggae.
El 17 de diciembre de 1977, Costello y su nuevo grupo The Attractions estaban invitados al programa Saturday Night Live, un programa de TV en directo, sustituyendo a los Sex Pistols. El guión decía que deberían interpretar “Less than zero”.
El trupo empezó a tocar pero, a mitad de la canción, Costello gritó a la banda. “¡Alto! ¡Stop!. La banda paró y acto seguido empezaron a tocar “Radio, Radio”, una canción crítica con la comercialización de la emisora y que tanto la NBC como Lorne Michaels, presentador del programa, les había prohibido toca expresamente. Costello fue expulsado del programa (la prohibición se levantó en 1989) pero, por otro lado, este pequeño acto de rebeldía resultó providencial para la evolución de las ventas de sus discos y para que su popularidad se disparara en los EEUU.
Bueno, también es cierto que, este preparado acto de rebeldía, tenía un precedente. Jimi Hendrix había hecho lo mismo en la BBC. Esta es la canción de la discordia: Radio, Radio.
Como estamos viendo, Elvis Costello no es un artista fácil. Su historial le precede. Durante un tiempo estuvo muy desprestigiado en los EEUU. Resulta que, borracho como una cuba en un bar en Columbus, y discutiendo con Stephen Stills, Costello se refirió a James Brown como un negro de manera ofensiva y, no contento con esto, también le toco a Ray Charles llamándole “negro, ciego e ignorante”. En fin, todo un catálogo de técnicas para hacer amigos.
Unos días más trde, en rueda de prensa, afirmó que “estaba borracho y quería ser desagradable para acabar rápidamente con la conversación, sin pensar que alguno de los presentes llevaría mis palabras a la prensa”.
Al poco tiempo del incidente, Costello rechazó reunirse con Ray Charles por que tenía un gran sentimiento de culpa y vergüenza a pesar de que el propio Charles había perdonado el incidente diciendo “la chala de borrachos no está destinada a ser impresa en un periódico”.
Y todo esto resulta todavía más paradójico porque Costello ya había trabajado intensamente dantes y después del incidente en la campaña Rock contra el racismo.
I don’t want to go to – Chelsea
La década de los 90 fue frenética par Elvis Costello. Publicó bandas sonoras instrumentales para series de TV, también experimentó con la música clásica colaborando con el Cuarteto Brodsky, un conjunto de música de cámara muy apreciado en el Reino Unido y también durante un tiempo estuvo tocando en pequeños locales para auditorios reducidos.
Todo esta actividad no impidió que la gira del verano del 96 diera la puntilla a su grupo The Attractions. Las relaciones entre Costello y el bajista Bruce Thomas habían llegado al límite, lo que ocasionó que Costello anunciara que, ésta gira, sería la última con The Attractions. Hicieron su último concierto en EEUU en Seattle antes de acabar definitivamente en Japón.
Costello siguió trabajando con frecuencia con Nieve y Pete, de hecho, ambos músicos sería miembros de la nueva banda de Costello, The Imposters.
En 1999, Costello contribuyó con una versión de “She”, lanzada en 1974 por Charles Aznavour, en la banda sonora de la película Notting Hill.
Esta es su versión.
Costello ha tenido una vida sentimental algo agitada, se ha casado en tres ocasiones, pero bueno, parece que éste último matrimonio con la diva de jazz Diana Krall tiene algún futuro.
Costello es vegetariano desde 1980, y todo por culpa del documental The Animals Film, una colección de imágenes que le movieron a rechazar la carne. Incluso se asoció con Paul McCartney para crear una campaña publicitaria que respalda los alimentos vegetarianos producidos por la marca Linda McCartney Foods.
Costello es también un forofo del fútbol, desde su infancia es un seguidor incombustible de su adorado Liverpool F.C. Tan lejos llega su afición que, en una ocasión debía dar un concierto en la ciudad de Norwich, pero a la misma hora del concierto se jugaba la final de la UEFA de 2005 entre el Milán y el Liverpool, que por cierto, este último perdía 3-0 al descanso. Costello no podía despegarse del televisor. Pero el Liverpool remontó hasta el 3-3, momento en que ya no pudo retrasar su salida al escenario… una hora más tarde de lo previsto. Empezada su actuación, se enteró de que su equipo había ganado en la tanda de penaltis, motivo por el cual paró el show y se puso a cantar como un loco el himno del Liverpool ante el desconcierto del respetable, turco por cierto, la final se jugaba en Turquía.
Tokio storm warning.
La salud también le ha jugado alguna mala pasada. En julio de 2018, Costello canceló las seis fechas restantes de su gira europea por orden de sus médicos, mientras se recuperaba de la cirugía a la que tuvo que someterse para tratar un cáncer. Con más optimismo que realismo, había pensando que podría completar la gira pero no fue así.
También es interesante su faceta más altruista. Es miembro de la directiva de la Jazz Foundation of América, donde comenzó a colaborar en 2001. Esta asociación se dedica a socorrer los hogares de músicos de jazz y blues de edad avanzada, entre los que se encuentran todos los damnificados por el huracán Katrina.
A Costello se le puede ver todos los años en las galas La gran noche de Harlem, una serie de conciertos anuales patrocinados por esta asociación.
Vamos a escuchar ahora Sulky Girl,
No vamos a despedir de Costello, por hoy, con una rareza, bueno, o quizá no tanto. En 2021, Costello lanzó Spanish Model, un remix de This Year’s Model de 1978 con letras en español. Cantantes y compositores de habla hispana de todo el mundo, tradujeron las 16 canciones del álbum al español. Y con estas nuevas voces, las de Juanes, Jorge Drexler, Luis Fonsi, Francisca Valenzuela, Fuego, Draco Rosa y Fito Paex, y con la instrumentación original de Attractios, sacaron a la luz este estupendo disco. Con él nos vamos. Este es el corte de Juanes, Pump il up.
Nos oimos dentro de quince días, así que, hasta entonces… Buenas vibraciones.