Como os anunciamos en el último programa, hoy nos centraremos en The Beatles. Dado que éste va a ser un tema largo, lo desgranaremos a lo largo de varios programas. Y es que, los Beatles fueron un milagro, parece que durante la década prodigiosa que duró su trayectoria, todo lo que hacían estaba cubierto por un manto que les protegía y les guiaba, todo lo hacían bien, todo fueron éxitos y aunque ahora sabemos que no todo fue tan fácil, la sensación que transmitieron en esos años fue sublime.
Resulta muy difícil, bueno, quiero decir que a mí me resulta muy difícil marcar etapas en la carrera de este grupo. Como dice Cesar Sanjuán en su libro Una historia de los Beatles, que por cierto recomiendo a cualquier aficionado, hay grupos que atendiendo a su trayectoria musical solo tienen una etapa, aun siendo ésta muy buena… pero solo tienen una etapa. Son fieles a un estilo que no cambia a lo largo de su carrera. Son previsibles. Un ejemplo irreverente y por el que pido perdón de antemano a todos sus seguidores, entre los que me encuentro: The Rolling Stones. Tienen el mérito innegable de llevar medio siglo en el escenario tocando casi… lo mismo.
Por el contrario, de The Beatles, podemos decir sin lugar a dudas que tuvieron diez etapas a lo largo de sus 10 años de vida, cada LP fue una vuelta de tuerca a la música pop. POR ESO LA REINVENTARON!!! POR ESO SON INDISPENSABLES!!! POR ESO NOS GUSTAN TANTO!!!
Pero vamos a empezar por el principio. ¿Cómo empezó todo?. Bueno pues, como casi todo el mundo sabe ya, o quizá no, la culpa de todo la tuvo el Sr. Ivan Vaughan. Este buen hombre, compañero de clase de Paul McCartney, invitó a éste a una fiesta parroquial en la que tocaba un grupo llamado los Quarrymen con la intención de presentarle a su leader John Lennon. John quedó impresionado con Paul ya que, entre otras cosas, supo afinarle la guitarra en condiciones. Esto fue un 6 de julio de 1957. Y así fue como dos genios musicales coincidieron en el tiempo para darnos a todos los momentos musicales más hermosos de nuestras vidas.
Fruto de esas sesiones en la BBC, podemos disfrutar ahora de otra versión, en esta ocasión la que hicieron de la canción de Little Richard, Long Tall Sally
El tercer elemento clave para el grupo fue George Harrison. Era el mejor guitarrista de todos ellos pero prácticamente un niño en ese momento. A pesar de las reticencias de John y gracias a sus habilidades con la guitarra quedó admitido en el grupo. Completaron el grupo Stu Sutcliffe, amigo de John y estudiante de arte como él y el batería Pete Best.
Aprendieron a tocar actuando en directo y después de darse a conocer en su Liverpool natal, principalmente en el ahora famoso club The Cavern, pasaron a Hamburgo, Alemania.
Esta fue una época realmente movida, actuando en clubs de striptease y bares de mala muerte y durmiendo en la trastienda de un cine.
Fueron expulsados del país por ser George menor de edad y volvieron cuando éste cumplió los 18 años. En 1961, un cantante americano (Alemania estaba llena de americanos y de bases después de la guerra) iba a grabar un disco y necesitaba un grupo de acompañamiento, se lo ofrecieron a ellos y así fue como los Beatles entraron por primera vez en un estudio de grabación. Vamos a escuchar ahora una curiosidad, la versión que de la canción “Luna De Miel”, de Mikis Theodorakis hicieron también para la BBC: The Honeymoon song
Brian Epstein tenía una tienda de discos en Liverpool y un día alguien le pidió un disco de un nuevo grupo que él no conocía. Se fue a verlos al Cavern y ese día la historia dio otra vuelta de tuerca. Epstein se convirtió en el manager de los Beatles. Les lavó la imagen, los pulió y empezó a buscarles un contrato discográfico en condiciones.
Para entonces ya eran solo cuatro los miembros de Los Beatles ya que Stu se había quedado en Alemania con su novia. Desgraciadamente falleció poco después víctima de un coágulo en el cerebro.
Pero bueno, nuestro grupo seguía su camino en medio de la incomprensión general. En enero de 1962 grabaron 15 canciones para la compañía DECCA RECORDS, en Londres pero sus directivos prefirieron a otro grupo, los Tremeloes concretamente, antes que a ellos.
Por fin, en junio de ese mismo año, la compañía EMI se interesa por ellos y a las órdenes del que sería su productor de cabecera, George Martin, grabaron una maqueta con cuatro canciones. A la vista del resultado, se decidió, bueno lo decidió Martin, cambiar de batería y así fue como Ringo Starr completó la nómina Beatles. El 4 de Septiembre de 1962 grabaron su primer disco oficial LOVE ME DO
Por cierto, en esta versión oficial de Love me do no es Ringo Starr el que toca la batería sino un músico de sesión llamado Andy White, algo que a Ringo le gustó tanto como tirarse al rio.
Pero bueno, aunque Love me do no fue un éxito fulgurante, su nuevo trabajo Please Please me, editado en febrero de 1963 llegó inmediatamente al número 1
Please Please Me fue el álbum debut de la banda británica y
su grabación constituyó un record. Se grabó en tres sesiones, un total de 9 horas y 45 minutos y se mezcló en un solo día. El disco, que tiene 14 canciones, todavía tiene 6 canciones de otros autores. Pero ésta sería la última ocasión. Y a pesar de todo esto, en mayo de ese año ya era número 1.
Merece la pena escuchar a Ringo Starr cantando “Boys” en su estreno como cantante con los Beatles.
La última canción que se grabó en estas sesiones fué “Twist and Shout”, en una interpretación casi dramática a cargo de John Lennon que arrastraba un fuerte resfriado y tenía la voz para pocos trotes. No obstante, el resultado fue magnífico.
Twist and Shout. Corte 14 de “Please, Please, me”
Y es aquí donde empezó la Beatlemania. Pero de eso hablaremos otro día porque, ahora, queremos saber que pasaba en España en ese momento.
En plena recta final de la crisis provocada por la Guerra Civil, allá por el año 1962 surgió un pequeño oasis de optimismo, las matinales del Circo Price, conocidas como «Festivales de Música Moderna».
El 18 de noviembre pasado se cumplieron exactamente 55 años de la primera de estas sesiones que nacieron a imitación de las que se organizaban en París o Londres, y que se celebraban cada quince días, hasta que fueron prohibidas por la autoridad competente.
Pero, al menos, dio tiempo a que por allí pasarán artistas que luego se convertirían en estrellas, como Miguel Ríos -alguna vez al frente de Los Relámpagos, o en solitario como Mike Ríos, Albert Hammond con The Diamond Boys y más tarde como Albert y Richard, Micky y Los Tonys, Los Estudiantes…
Los Relámpagos
Pero las matinales representaron algo más. Según cuenta en una entrevista Miguel Angel Nieto, su organizador: «Desde el punto de vista social, fue el principio de una ruptura con los principios del régimen, que lo que quería era tener una juventud sometida a los dictámenes del Frente de Juventudes, y no querían que hubiese ningún tipo de manifestación que les permitiese cierta libertad a través de la música. Eso quedó muy patente cuando el señor comisario nos prohibió continuar».
Nos despedimos con una de esas intervenciones históricas, en este caso de Mike Rios y su “Popotitos”.
-Antonio Giménez-