En el programa de hoy os propongo un virtual paseo por la antigua calle de la Yedra, parte de la actual calle de San Vicente de Paúl, para cuando os sea posible realizar uno de forma real, pateando las calles de la ciudad como hacíamos antes de la pandemia del Covid 19. Además de virtual, el trazado es más anguloso, sinuoso y variado que el rectilíneo y despejado que podéis contemplar en los mapas en internet, o directamente si sois vecinos de esta calle, porque comenzaremos la visita a esta zona en la década de los años 60 del siglo XIX. Vamos a ello.
Ya unos años antes se había proyectado la nueva calle de Don Jaime I sobre el ensanchamiento y realineación de las antiguas calles de San Gil, Baja de San Pedro, Virgen del Rosario y Cuchillería. Además, la prolongación de la calle del Trenque hasta la plaza del Pilar se abría paso a buen ritmo entre el antiguo caserío de la zona para formar la nueva calle de Alfonso I. De esta forma, en 1860 el Ayuntamiento acordó abrir una nueva calle aprovechando el trazado de la calle de la Yedra que comenzaba en el Coso Medio, y prolongarla hasta la ribera del Ebro por la antigua calle de Villalobos y atravesando las de la Enseñanza, Fosal de San Lorenzo, San Lorenzo, Mayor, Fierro, Don Juan de Aragón, plazuela del Reino y calles de los Arcedianos y del Conde de Alperche. Sin embargo, no fue hasta 1883 cuando se presupuestó una partida para estudiar el proyecto, que se fue dilatando en el tiempo por la complejidad del asunto, que requería también de intervenciones en las calles transversales que iba cruzando, y siempre teniendo en cuenta las estructurales dificultades económicas del Ayuntamiento.
Así llegamos a los años 30 del siglo XX, cuando apenas se habían realizado dos tramos del proyecto: el primero, desde el paseo del Ebro y hasta la plaza del Reino, por las antiguas calles del Conde de Alperche y del Chantre. El segundo se había podido hacer tras el abandono del antiguo convento y colegio de La Enseñanza, que en los años 20 se trasladó a su actual ubicación en la calle de Bilbao, y cuya gran superficie entre las calles de San Jorge y San Lorenzo fue reurbanizada de acuerdo con este proyecto. Tras la victoria electoral del Frente Popular en 1936 se aceleraron las gestiones y se incrementó la dotación presupuestaria para acometer las expropiaciones y derribos en las calles de la Yedra, San Jorge, Don Juan de Aragón, Cíngulo y Lezaun. Tras el 18 de julio hubo un parón hasta octubre de ese año, en que se aprobaron las ordenanzas que definían la estética de los nuevos inmuebles a construir sobre los solares dejados por los derribos, proceso que se prolongó hasta bien entrados los años 40 (el mercadillo de esta nueva calle fue inaugurado en julio de 1951). A pesar de los intentos por convertir a esta calle en una nueva calle de Alfonso I, ni la clase social de sus moradores ni los comercios establecidos en ella terminaron de darle ese ambiente de prestigio que tenía aquélla. Tampoco pudo competir con la calle de Don Jaime I, quedándose en todo caso como vía de ingreso al centro para el creciente tráfico rodado desde el puente de Hierro, cualidad que siguen manteniendo en la actualidad de forma especialmente intensa.
Sí que compartía con estas dos calles el haberse realizado sobre el derribo de una parte del antiguo caserío de la ciudad, llevándose por delante algunas de sus más antiguas calles y plazas y una irrepetible galería de casas derribadas, como la de los Salavert, marqueses de Torrecilla más conocidos por la denominación de Sora del que se conserva el único vestigio no derribado: su puerta de acceso, visible hoy en el convento de las Hijas de la Caridad de Santa Ana o Cocina Económica, en la calle de Salduba.
Terminamos así esta audición del programa “Zaragoza te habla”, y os emplazo para una próxima edición. Salud pública, ánimos y abrazos virtuales, y que no os coma la oreja cualquier descerebrado, o lo que es peor, con el cerebro bien basculado hacia la derecha extrema. Ya sabéis que las recetas fáciles, como las herramientas baratas y de cuestionable calidad, tienen las patas bien cortas, y son perfectamente inútiles si de lo que se trata es de arreglar algo. Nos escuchamos.
2 pensamientos sobre “Zaragoza te habla – La calle de la Yedra”
la puertra esculpida se salvó y se puede ver frente a San Juan de los Panetes en un edifico de los juzgados pienso yo.
Gracias por el trabajo de recopilación y memoria.
Mi padre siempre se refirió a la calle San Vicente de Paul como el «desanche» de la yedra y cuando tránsito por ella, me acuerdo.