Hola, hola, yo soy Antonio Giménez y esto es… NADA MÁS QUE MÚSICA
¡Hello! Así nos saluda el amigo Liam Gallagher, supongo en en nombre de todo su grupo, OASIS, desde su segundo trabajo (What’s the story) Mornint glory. Este álbum fue lanzado el 2 de octubre de 1995 y estuvo producido por Owen Morris y el guitarrista del grupo, Noel Gallagher. Un trabajo muy elaborado con coros y arreglos de cuerda que, desde luego, no estaban en su anterior trabajo.
El grupo se había formado en Manchester en 1991 y al principio se hacían llamar The Rain. Los socios fundadores fueron Liam Gallagher, voz principal, Paul Arthurs, guitarra, Paul McGuigan al bajo y Tony McCarrol a la batería. Unos meses más tarde se uniría al grupo Noel Gallagher, hermano de Liam que asumió la guitarra principal y voces. A pesar de llegar el último a la banda, muy pronto se convirtió en su líder y compuso la mayoría de las canciones de sus cuatro primeros álbumes.
Con el grupo definido, Liam propuso el cambio de nombre por el de OASIS y con él se quedó. Y aquí empieza la historia.
Segundo corte del disco, Roll With it.
La entrada en la banda de Noel fue providencial. Hasta ese momento habían sido un grupo que taladraban a sus vecinos con cuatro canciones pero… Noel tenía ideas. Y sobre todo, tenía canciones que había compuesto mientras trabajaba como técnico de sonido con otros grupos. Noel modeló el grupo a su gusto simplificando al máximo su estilo y dándole un toque distorsionado que, como alguien dijo: “están tan desprovistos de delicadeza y complejidad que suenan prácticamente imparables”.
Con todas estas premisas, el grupo se pone a trabajar, a ensayar duro y a tocar por los clubs de la zona. Todo este trabajo no fue en vano porque, al poco tiempo, fueron invitados a tocar en el club Wah Wah de Glasgow. Y allí que se fueron con su furgoneta pero, algo tenía que salir mal, se les negó la entrada porque no estaban en la lista de actuaciones de esa noche. Tras largas y arduas negociaciones, se les permitió actuar de teloneros de las bandas que si estaban programadas esa noche y, afortunadamente, todo salió bien porque un cazatalentos que estaba al acecho, les ofreció un contrato.
Vamos a seguir con la música. Escuchamos ahora Wonderwall.
Tras sacar al mercado, con mayor o menor fortuna, una serie de sencillos, llega su álbum debut Definitely Maybe. Lanzado al mercado el 29 de agosto de 1994, entró en las listas de álbumes del Reino Unido en el número uno, una semana después de su lanzamiento. Esto les convirtió en el grupo con un álbum debut más vendido.
Y aquí las cosas se desmadraron. Las drogas, el alcohol y los egos machacaron a todos los componentes de la banda y su relación se deterioró de una manera terrible. El momento álgido del problema llegó en 1994, en un concierto en Los Angeles. Liam, que iba hasta la bandera, insultó al público en varias ocasiones y, para terminar de armarla, tiró una pandereta a la cabeza de su hermano. Noel que, al parecer, no tenía el mismo sentido del humor que su hermano, abandonó la banda y al día siguiente voló hasta San Francisco.
La mediación del mánager que, supongo, veía desaparecer por un momento la gallina de los huevos de oro que había fabricado, hizo que Noel modificara su decisión y volviera a la banda. La gira pudo al fin reanudarse en Minneapolis. También allí hicieron las paces los hermanos Gallagher… de momento.
El grupo siguió sacando sencillos hasta que llegó su segundo éxito internacional, precisamente, el que hoy nos ocupa: (What’s the story) Mornning glory?
Bien pues, de este disco, vamos a seguir escuchando algunos de sus cortes, en este caso Don’t look back in anger. Francamente un título que, tratándose de los hermanos Gallagher, nadie hubiera imaginado: No mires hacia atrás con ira.
La grabación no empezó bien. Nada más empezar despidieron al batería, Tony McCarrol. Según Noel por su “incapacidad técnica para tocar temas complejos”. Fue sustituido por Alan White. En cualquier caso, este asunto no perjudicó en nada a la creatividad del grupo porque el álbum supuso que la banda fuera considerada la más importante de su época. El disco llegó al número 1 en un montón de países y ha vendido, más o menos, unos 30 millones de copias en todo el mundo.
En esas fechas todos los medios británicos especializados dieron cumplida cuenta de la rivalidad que, se decía, había entre Oasis y el grupo de britpop BLUR. Noel Gallagher había declarado que “algunos de los integrantes de Blur parecía buena gente, pero espero que dos de ellos mueran de sida”. Se refería a Damon Albarn y Alex James, fundadores de la banda. Por supuesto, se retractó más tarde de estas palabras y dijo que esa ficticia enemistad resultaba patética. Y todo fue porque las dos bandas habían puesto a la venta sus sencillos el mismo día. El de Blur superó en ventas al de Oasis en la primera semana y esto, señoras y señores, no lo llevaron demasiado bien.
Some Might say, “Algunos podrían hablar”, otra canción de Noel. Fue el primer sencillo extraído del álbum y le dio a la banda su primer número uno en las listas del Reino Unido.
Es un hecho contrastado que, cuando mejor van las cosas artísticamente, más problemas dan los egos de los artistas. En agosto de 1996 la banda fue invitada a participar en los famosos conciertos acústicos que organizaba la cadena MTV, los prestigiosos “desenchufados” por los que ya habían pasado gente muy importante en el mundillo. Lian dijo, verdad o no, que no podía cantar porque tenía mal la garganta, así que fue su hermano Noel el que asumió su rol como voz principal. Bueno pues esta nimiedad provocó otra crisis en la banda en la que se llegó a hablar de separación. Otra vez tuvieron que salir a explicar que no, que no pasaba nada. Bueno, casi nada.
A trancas y barrancas, el grupo siguió sacando álbumes de éxito hasta que el viernes 28 de agosto de 2009, tras una pelea épica entre bastidores de los dos contrincantes principales, los hermanos Gallagher, el grupo anuló su actuación en el festival de rock de Seine, en las afueras de París. Y todo esto escasamente cinco minutos antes de salir a escena. Los organizadores, todavía en shock, anunciaron, por indicación de Noel, que la banda “ya no existe”. Y aquí se acabó la gira, la banda y la hermandad.
Cast no shadow, No hacer sombra. ¿Estaría Noel pensando en su hermano?.
Han pasado 15 años desde la separación de la banda. Recientemente, Liam ha concedido una entrevista a The Guardian en la que reflexiona sobre la ruptura de la banda. Dice: “Me tiraron debajo del puto autobús. Toda mi vida se derrumbó, incluso durante cinco años después de la ruptura mi vida fue un infierno”. Se refiere a su hermano y a Marcus Russell, manager de Oasis.
Y sigue: “Noel siempre tuvo la intención de ir en solitario, pero decidió culparme por mi afición a la bebida en lugar de admitir que quería dejar la formación. Si quieres hacer tus cosas porque crees que no recibes la atención adecuada, pues dilo y da la cara. Además, mi relación con la bebida siempre fue la misma, desde el primer día, y joder, también la de él. Eso fue lo que hizo de Oasis lo que llegó a ser. Pero, de la noche a la mañana, el tipo se convierte en un capullo blando que no paraba de sermonearnos “no podemos tener este comportamiento”. Vete a la mierda”. Literal.
En fin, los, al parecer, irreconciliables hermanos han seguido, cada uno por su lado sacando discos, todos ellos con una buena recepción por parte de la crítica y del público pero sin el brillo y la calidad que alcanzaron juntos.
Sobre Morning glory, Noel contaba que la había compuesto mientras paseaba escuchando música y aspirando cocaína. Estooo… pues nada.
En fin, unos buenos alicates estaban hechos los dos hermanos. Sus caminos se han distanciado absolutamente, tanto en lo artístico como en lo personal y la última pelea parece ser que sigue presente alentando el resquemor de los dos hermanos. Hoy solo se comunican con insultos en las redes sociales.
No obstante, tenemos que decir que todavía tienen una cosa en común, su lealtad inquebrantable con el Manchester City.
¡Qué cosas!
Nos vamos acompañados por la música de Oasis. La canción que cierra el disco, Champagne Supernova, tiene su historia. Noel, su compositor, se la presentó al grupo en el autobús de la gira. Paul Arthurs, el otro guitarrista, se puso a llorar porque le parecía muy bonita. Noel, distraído como estaba con la interpretación, no entendió a su compañero y se enfrentó al él diciendo: “¿Pero tan mala te parece?”.
Amigas, amigos, hasta dentro de quince días.